La única entrada a la Alcazaba formalizada es a través del antiguo seminario, ya que fue propiedad de éste, y en su gran explanada los seminaristas jugaban al fútbol. Para salvar la calle Amezcua, se hizo un pasadizo en alto que le sirve de unión.

El recinto de la alcazaba medieval era mucho más amplio que el que hoy se nos muestra, ya que entonces incluía el seminario, iglesia de San Agustín y palacio de los Pérez Barradas.

En lo que hoy se conserva se pueden distinguir varios recintos claramente diferenciados. El más bajo, que fue campo de fútbol, no muestra restos visibles en su interior, ya que se ha rellenado y allanado, por lo que futuras excavaciones arqueológicas pueden deparar importantes hallazgos.

En él se alza una gran torre del homenaje. Si bien conserva importantes restos de tapial en sus muros y enlucido de cal en sus paramentos, se desconoce su distribución primitiva ya que fue usada durante la Guerra Civil, y lo que hoy se conserva es resultado de una restauración que ha transformado la torre con la finalidad de servir de base a la virgen que la corona.

Hacia el sur hay otro recinto más elevado que está fortificado. Presenta varias torres, dos de ellas paralelas a la muralla exterior y unidas por un adarve.
Fuera de este recinto está la muralla exterior, en la que se insertan otras tantas torres. La mayor está llena de escombros y en uno de sus lados hay una puerta con arco de medio punto, cegada, que pudo ser entrada a la ciudad.

Un valor añadido de este importante lugar es que es un magnifico mirador, un gigantesco planetario desde el que se visualiza toda la ciudad, la hoya y los dominios que se extienden hacia el Marquesado y Sierra Nevada. Esta estratégica situación nos advierte de la sabia elección que del lugar hicieron sus constructores y que refuerza el hecho, según historiadores, de que aquí estuviese el oppidum ibérico, luego el fuerte romano y por fin la actual alcazaba.

Su interés arqueológico e histórico y esta privilegiada situación, han convencido para que pase a titularidad pública, con un importante proyecto de excavación que persigue crear un parque arqueológico para recreo de la ciudad y del conocimiento histórico.